Destaca el papel “vital” de la Comunidad de Madrid, porque con Sánchez “España se ha convertido en una fábrica de expulsar capital a Portugal y otros países”

En su viaje a Nueva York, Ayuso visitó el restaurante ‘La Nacional’, acompañada del cocinero Paco Parreño

Isabel Díaz Ayuso ha encontrado en Nueva York un interés creciente por la economía liberal de Madrid y las posibilidades de inversión en esta región, según comentan en su equipo. La presidenta de la Comunidad está aprovechando su tercer viaje a Estados Unidos para mostrar la política económica y fiscal madrileña «de éxito», basada en tener impuestos bajos, en reducir al máximo la burocracia y, cómo no, en la libertad. En la tercera jornada de su viaje institucional a Estados Unidos, Ayuso protagonizó un desayuno informativo organizado por Spain-Us Chamber of Commerce e Invest in Madrid bajo el título ‘Madrid, líder en atracción de inversiones extranjeras’.

Allí avanzó que en 2024 entrará en vigor una nueva deducción en el IRPF destinada a cualquier persona que no haya residido en España en los cinco últimos años y quiera invertir y trasladarse a la región, convirtiéndose en nuevo contribuyente. En ese caso, se podrá desgravar el 20 por ciento del total de la inversión realizada en activos financieros en la cuota autonómica del impuesto, siempre que se mantenga durante los siguientes seis años.

Se trata de la ley de incentivos fiscales que no pudo aprobarse la pasada legislatura por el bloqueo de Vox, y que Ayuso ha situado ahora como prioridad de su nuevo Gobierno autonómico. De hecho, será una de las primeras leyes que se remitan a la Asamblea para su tramitación y aprobación.

La inversión beneficiada será tanto para activos financieros como inmobiliarios. «Que se queden a vivir entre nosotros es lo que queremos, que lleguen a Madrid nuevas familias que se establezcan aquí y vengan con sus hijos a seguir contribuyendo a esta España», explicó Ayuso.

Un madrileño retornado o extranjero que invierta un millón de euros, se podrá deducir el 20 por ciento del total si su cuota de IRPF para ese año es igual o superior. En caso contrario, lo que no se pueda aplicar ese año, se repartirá en los cinco siguientes ejercicios. Ayuso defiende que se trata de una medida fiscal diseñada para facilitar la llegada de capital foráneo y nuevos contribuyentes y, también, para favorecer a las empresas que ya están radicadas en la Comunidad de Madrid y que buscan fondos para poder expandir sus negocios.

Seguridad jurídica
En la sede de la Cámara de Comercio España-EE.UU. frente a un nutrido grupo de inversores y empresarios, Ayuso envió un «mensaje de tranquilidad» a las empresas ante la situación política que se vive en España y les garantizó seguridad jurídica para sus inversiones en la región «siempre» y «a pesar de los intentos de ciertas minorías por deteriorar la vida política española e influir en el futuro del Gobierno central». La presidenta regional madrileña explicó que España «es un país fuertemente descentralizado» y, por tanto, las comunidades autónomas tienen «una voz muy importante y son un contrapeso, sobre todo, cuando las políticas del Gobierno son erráticas».

Ayuso aseguró que en España «hay una cohesión social como se ve en pocos lugares del mundo, aunque ahora pretendan algunas minorías llevarnos por otro camino, hacia el del resentimiento, para romper con la Transición, que de lado a lado unió a la sociedad española».

Estados Unidos es el principal inversor en la Comunidad de Madrid, con un volumen superior a los 20.000 millones de euros desde 2019 hasta la fecha. Esto supone que 2 de cada 3 euros (el 67 por ciento) invertidos por Estados Unidos en España vienen a la región, según datos de la Comunidad.

Más tarde, en una rueda de prensa durante su viaje a Nueva York, Ayuso acusó a Sánchez de convertir España en una «fábrica de expulsar capital», que se va a «Portugal y a otros países», por lo que se mostró convencida del papel «vital» que tiene la región madrileña para atraer inversores.

Hispanidad
Más tarde, en la presentación de la gira Internacional del Teatro Real en Nueva York, Ayuso ha ofrecido algunos datos que certifican el éxito de las fiestas de la Hispanidad en Madrid. El número de participantes ha superado los 560.000 en su tercera edición; la primera hace dos años contó con unas 100.000 personas y en la segunda edición del año pasado fueron 250.000.